Muchos usan el dolor de otros para enriquecerse,
solo se conforman con ver nuevos amaneceres,
viven en la agonia del trabajo y los quehaceres,
dichosa rutina que mata uno y mil placeres...
Nunca es tarde para empezar y retractarse,
volver a ver la vida de una manera; como antes,
perserguir un sueño, algo no muy distante,
volver a ser niño por un dia y relajarse...
No hay comentarios.:
Publicar un comentario